Dejó todo para ganar, pero perdió
Juventud cayó 3 a 1 como local. La derrota complicó aún más al elenco pergaminense en la tabla general. El domingo visitará a El Linqueño.
Juventud necesitaba ganar pero no sólo que no consiguió la victoria, sino que encima padeció una nueva derrota. Es muy difícil explicar que un equipo que hizo todo para ganar, haya terminado con las manos vacías, pero así fue. La historia fnal dejó a los conducidos por Rubén Pérez sin eso que tanto necesitaban: los tres puntos. El equipo de Pergamino agotó todos los recursos que tenía a su alcance para quedarse, por cómo se terminó dando el en- cuentro, al menos con un punto. Desde el mismísimo inicio salió a buscar lo que tanto necesitaba, el triunfo, para escaparle a los úl- timos puestos en la tabla general de posiciones. Mostró actitud, ganas, urgencias, ideas, algunas claras, otras no tanto y también evidenció desesperación. Pero si algo tuvo Juventud, es que fue al frente. Trató de cerrarle los cami- nos a La Emilia, apretó en campo ajeno y todo momento intentó ahogar a su rival. Tras la fnaliza- ción del primer tiempo muchos imaginaban que la intención de los celestes decaería después de tanto ritmo vertiginoso, no tan sustentado en lo futbolístico, pero sí en las ganas constantes de cambiar la historia. Pero nada de eso ocurrió, Juventud siguió yendo hacia delante pero en la se- gunda mitad todo se complicaría en un trámite de juego no apto para cardíacos. En la primera mitad, los celestes comenzaron a merodear seriamente el área de los “pañeros”. Con algunas corridas de Bulgarelli, la potencia siempre cargada de peligrosidad de Becerra, más el empuje de Navone y Guidi desde la zona media, Juventud llegaba hasta el área rival, pero le faltaba ese grado de lucidez para pegar el primer golpe. La Emilia trataba de evitar riesgos y abusaba de los pelotazos para Páez y Bahi- llo. Lo tuvo la visita en una de sus aproximaciones pero fue Portiglaitti, en una tremenda tapada, quién evitó la primera caída. Un rato antes, lo tuvo Bulgarelli pero de milagro, tras el cruce de un defensor, no quedó cara a cara con Ozafrán. Volvió a acercarse Juventud mediante un remate desde afuera de Navone y también lo tendría a través de un cabezazo de Becerra que se escapómuy cerca del palo izquierdo del arquero. Los pri- meros cuarenta y cinco minutos fnalizarían en tablas con una leve supremacía del conjunto perga- minense. En el complemento, el técnico visitante mandó a la cancha a Paredes en reemplazo de Ibarra sacando un defensor, buscando mayor volumen de juego en la zona central. Pero, aún así, los conducidos por Pérez si- guieron imponiendo su ritmo. A los 7 minutos, llegó la expulsión de “el chompi” Fernández por doble amarilla. Eso fue un punto de infexión en el partido, porque Juventud debió acomodarse a la situación y encima de males a los 22´, Paredes apareció sólo tras un envío desde la derecha y con una buena defnición colocó el 1 a 0. El gol de la visita, la rápida expulsión y la necesidad de Juventud hacían presagiar lo peor, pero el conjunto local sacó fuerzas de dónde no tenía y a los 29 minutos consiguió la igualdad después de una buena asistencia de Bulgarelli que capitalizó Becerra que defnió de manera perfecta para estampar el 1 a 1. De ahí en más, se vio lo mejor del juego. Con un hombre de menos los celestes fueron en busca de la victoria, pero a los 32´, luego de un tiro de esquina desde la derecha, Delorfanello sin marcas, la encontró dentro del área y de zurda puso el 2 a 1. Nervios, anisedad, desesperación, ganas, esfuerzo, empuje y tantos otros condimentos comenzaron a aforar en la tarde dominguera. A los 37 minutos, tras una pelo- ta cruzada en el área visitante, el árbitro sancionó penal y era la oportunidad más clara de Juventud para ponerle justicia a las acciones. Becerra ejecutó con fuerza pero el balón se fue por encima del travesaño y en ese ins- tante el equipo el celeste entendió que no era su tarde. Becerra en una corrida, nuevamente estaría cerca del gol pero esta vez fue el travesaño que intercedió para que el balón no ingresara en el arco. Para colmo de males, a los 44´, con un Juventud jugado en ataque, Páez metió un cabezazo bombeado ingresando por el callejón izquierdo para decretar el defnitivo 3 a 1. El team de Per- gamino murió de pie, haciendo todo lo que tenía a su alcance para ganar pero durmió tan sólo un instante, luego de aquel corner que terminó en la segunda conquista visitante que para el partido sería determinante. La Emilia especuló y ganó, Juven- tud hizo el gasto y se quedó con las manos vacías.